Una Argentina que sólo desean los "antiargentinos"

Una Argentina que sólo desean los "antiargentinos"

 

 

Argentina “partida”  por pretensiones foráneas

Transcripción de un artículo histórico escrito por el investigador del tema “Mapuche” Gustavo Peón.

 

“En Mesoamérica, se desarrollaron cientos de pueblos dentro de dos vertientes, la maya y la azteca, que inventaron sistemas de escritura, una mitología compleja presidida por el Colibrí Zurdo (Huitzilopochtli) y la Serpiente Emplumada (Quetzalcoatl), construyeron ciudades, pirámides. Se pueden admirar sus monumentos en sitios como Cholula, Teotihuacán, Chichén Itzá, Tikal y muchos otros y pasar días enteros en el Museo Nacional de Antropología de México admirando sus creaciones” asegura Gustavo Peón, un estudioso del tema.

En los Andes existió otro conjunto de culturas importantes, dominadas en la última etapa por los incas que hicieron algo semejante. Se puede constatar su sofisticación visitando Tiahuanaco, Nazca, Cuzco, Machu Pi-cchu, Vilcabamba y muchos otros lugares.Además de las sociedades sedentarias, algunas naciones indígenas nómades, dedicadas a la guerra, aprendieron a manejar los caballos que trajeron los españoles, para formar ejércitos ecuestres con los que exterminaron o sometieron a otros pueblos. En Norteamérica fueron siux, pies negros, cheyenes, y comanches. En Sudamérica lo hizo solamente un pueblo, asentado en la actual Araucanía chilena, que enfrentó a incas y españoles sin someterse nunca. Les denominaron araucanos vocablo derivado del quechua auca, que significa salvaje. Desde el siglo XIX se llaman a sí mismos mapuches, fundiendo dos palabras del mapudungún: Peónmapu y che, tierra y gente”, prosigue Peón.

Durante la Colonia y el inicio de la República, se mantuvo un límite con la cultura blanca borrado alrededor de 1860, cuando Chile organizó la “Ocupación de la Araucanía” y Argentina la “Guerra del Desierto”, a partir de que los loncos (caciques) araucanos celebraron una Futa Kolloj, Constituyente del Reino de la Araucanía, llamado también la Nueva Francia, con capital en Perquenco, proclamando rey al aventurero francés Orélie Antoine de Tounens. Sus territorios comprendían todo los que está al sur del río Bío Bío en Chile y del Río Negro en Argentina, las islas Malvinas y la Antártida.Fue el tiempo en que Francia quiso intervenir en América, invadió México y proclamó emperador a Maximiliano de Habsburgo. Los franceses crearon el término “América Latina”, para incluirse en una América en la que nunca habíamos hablado latín.

Históricamente muchos dirigentes mapuches soñaron siempre con formar un país independiente, cosa que nada tiene que ver con ideologías, como creen algunos argentinos anclados en los setenta.Los líderes mapuches han buscado distintas alianzas para conseguir su objetivo: fundaron la Nueva Francia en el siglo XIX, nombraron al general Augusto Pinochet “Fauta Lonco”, (Gran Autoridad) de su nación, hoy intentan instalar su país al que llaman Wallmapu. Una monarquía de papel europea, Pinochet y algunos entusiastas de izquierda han sido usados con este fin.

Según el censo, existen en Chile 1.745.147 mapuches, que constituyes el 9,93% de la población. En Argentina, según el Indec, hay 105 mil mapuches, el 0,2% de la población. El 94% de los mapuches que existen vive en Chile y el 6% en Argentina, es un tema casi totalmente chileno.

La gran mayoría de los mapuches argentinos trabajan y producen en el sur del país. Un grupo que no llega a las mil personas, relacionado con mapuches chilenos, formaron el RAM. Les apoyan bastantes argentinos que mezclan novelería indigenista, anomia, e ignorancia. Pocos son los seguidores del actual rey de Nueva Francia, Federico I, o del Fauta Lonco Augusto Pinochet.

En Chile es importante la organización Identidad Cultural Lafkenche (guerrera) que representa a las comunidades del lafken mapu de Chiloé y Palena y articula las acciones violentas en ambos lados de la Cordillera de los Andes.Su facción más radicalizada es la Coordinadora Arauco-Malleco (CAM), que ha reivindicado cientos de actos terroristas, incendios de camiones, propiedades públicas y privadas, empresas forestales, Iglesias Católicas y ha organizado invasiones de tierras. Actualmente han declarado la guerra al Estado chileno que tiene un presidente de izquierda, Gabriel Boric.

En Chile es importante la organización Identidad Cultural Lafkenche (guerrera) que representa a las comunidades del lafken mapu de Chiloé y Palena y articula las acciones violentas en ambos lados de la Cordillera de los Andes.Su facción más radicalizada es la Coordinadora Arauco-Malleco (CAM), que ha reivindicado cientos de actos terroristas, incendios de camiones, propiedades públicas y privadas, empresas forestales, Iglesias Católicas y ha organizado invasiones de tierras. Actualmente han declarado la guerra al Estado chileno que tiene un presidente de izquierda, Gabriel Boric.

Su brazo en Argentina es el Movimiento Mapuche Autónomo del Puel Mapu (MAP) que, en sus palabras, “se define como un Movimiento y una Línea Política Filosófica, Autónoma e Independiente, que continúa desarrollándose en Neuquén, Río Negro y Chubut, entre Comunidades, organizaciones e individuos que se definen Autónomos, desde hace muchos años”. El MAP actúa a través de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), un “brazo operativo de Comunidades del Puel Willi Mapu que mantiene ocupado el Estado argentino”.

El RAM ha reivindicado cientos de actos terroristas en Neuquén, Chubut y Río Negro. En un manifiesto de 2014 declaró la guerra a Argentina y Chile, anunció que atacaría a los enemigos winka capitalistas (argentinos que no son mapuches) y al Estado opresor. Sus militantes son violentamente antiargentinos, han quemado y escupido la bandera nacional, vandalizaron placas de soldados caídos en las Malvinas y el Monumento a San Martin, a quien acusan de invasor.

Actualmente pretenden el bonito Lago Mascardi. Betiana dijo en una entrevista “Somos un pueblo preexistente al Estado argentino y al Estado chileno. Estamos recuperando el territorio que nos robó el Estado argentino. No tenemos ninguna frontera de provincia ni de país.”

El RAM no usa los territorios que ocupa para producir nada, son bases para asaltar lugares aledaños y hacer negocios ilegales. No se sabe que produzcan algo en las zonas que ocupan, pero tienen autos de alta gama y un aparato que cuesta enormes cantidades de dinero. Como es común con movimientos insurgentes de esta época, viven del contrabando, el narcotráfico, el chantaje, el secuestro, la ocupación de tierras. Siguen la lógica de la antigua guerra de guerrillas, cuando se formaban territorios liberados para luego conectarlos y tomar un país.  

El CAM y el RAM acusan a la Iglesia Católica de haber sido una de las autoras de la invasión a sus territorios en la conquista. Cuando el Papa quiso visitarlos, Aucán Huilcamán, vocero del Consejo de Todas las Tierras dijo: “Queremos plantear claramente al jefe de Estado del Vaticano y de la Iglesia Católica su responsabilidad por el genocidio cometido en el sur de Chile y Argentina, porque los españoles contaron con el apoyo de esta Iglesia”. Le pidió que envíe un cheque de indemnización por 10 mil millones de dólares y que se abstenga de pisar territorio mapuche. Han quemado muchas iglesias en Chile y empiezan a hacerlo en Argentina. En 2009 la provincia de Río Negro adoptó la bandera del Reino de la Araucanía, aprobada en un Trawun presidido por el Rey Aurelio-Antonio I en 1861. Pocos se dan el trabajo de estudiar e investigar.

La pasada semana Alberto Fernández, asistió a una reunión en la que estuvo ausente la celeste y blanco, presidida por la bandera Wenufoye, símbolo del Wallmapu,  creada en 1992 por el Consejo de Todas las Tierras.

Fue recibido con un cartel que decía “Presidente, usted está pisando tierra mapuche”. Es difícil imaginar cómo el Gobierno va a explicar a los millones de winkas argentinos que viven en Bariloche, Mar del Plata, Bahía Blanca, las provincias de Neuquén, Río Negro, Mendoza, Córdoba, la provincia de Buenos Aires que deben irse, para que esas tierras sean entregadas a mapuches que tendrían que venir de Chile. Los que hay en Argentina serían insuficientes para ocupar tan enormes extensiones. Es interesante ver el tema en el mapa adjunto.

También tendrá que explicar por qué entrega Vaca Muerta y los enormes recursos que existen en esos territorios a los miembros de una etnia chilena.

Parecería que ante el peligro de una invasión extranjera las Fuerzas Armadas y la Gendarmería deberían tomar cartas en el asunto, pero su comandante en jefe y muchos funcionarios no se han enterado del problema. Tal vez estén preparando sus próximos mensajes traducidos al mapudungún. FUENTE. GUSTAVO PEÓN-   TRANSCRIPCIÓN EXACTA DE SU ARTÍCULO PUBLICADO EN UN MEDIO INTERNACIONAL-*Profesor de la GWU. Miembro del Club Político Argentino.