Volvió el Cepo: versión Cambiemos

Volvió el Cepo: versión Cambiemos

Por Juan Cruz Araya

La inestabilidad argentina se hace cada vez más evidente cuando se observa la política y la economía en nuestra sociedad y este domingo no fue la excepción.

Y es que es medio de un día de “descanso" del pueblo, desde la presidencia se anunció una de las medidas más cuestionadas del gobierno anterior; el “Cepo" cambiario.

Aquella medida de la kirchnerismo que fue dada de baja por el presidente Macri apenas asumió el mandato del país.

Una palabra tan temida como resistida, resurgió de forma inesperada en el día de hoy, cuando el gobierno a través del BCRA decretó un tope de compra de hasta 10.000 dólares para personas físicas, con el fin de hacer frente a la gran demanda de la divisa norteamericana.

Cabe destacar que este tope es, probablemente, superior a la capacidad promedio de compra de un ciudadano de clase media y por lo tanto menos riguroso que aquel que rigiera durante el año 2011/2015.

Sin embargo cada empresa que requiera comprar dólares deberá, necesariamente, solicitar autorización al Central porque para ellos la restricción de compra es total.

El decreto de necesidad y urgencia( DNU) publicado de forma extraordinaria este domingo se fundamentó en la necesidad de proteger al pequeño ahorrista para que haya mayor liquidez.

También sostiene que mañana los bancos trabajarán en el horario de 10 a 17 horas esperando una gran afluencia de público.

Así mismo otro de los considerando de este decreto es que se deberá solicitar autorización para la compra de divisas extranjeras destinados para viajes, lo que trajo al imaginario popular el fantasma de la restricción impuesta por el gobierno de Cristina y que fue derogado en 2016 al poco tiempo de la asunción de Macri.

Algunos economistas especulan con la posibilidad de un feriado cambiario para el día de mañana y la incertidumbre de la reacción de los mercados ante esta medida, cuando el día lunes vuelvan a la actividad normal.

Nuevamente la Argentina despertará con un lunes agitado en términos económicos, de igual manera que sucedió el 12 de agosto posterior a las PASO, y quedará a la expectativa de los efectos posteriores que traerá aparejado el DNU.