Investigadora del Conicet realiza la campaña #VentilarFunciona
Investigadora del Conicet realiza la campaña #VentilarFunciona
Investigadora del Conicet realiza la campaña #VentilarFunciona

Investigadora del Conicet realiza la campaña #VentilarFunciona

Natalia Rubinstein es bióloga, docente de la UBA e investigadora del Conocer; y es quien se propuso medir el dióxido de carbono (CO2) en lugares claves de la localidad bonaerense de Pehuajó -donde creció- cómo el hospital municipal o una residencia geriátrica para mejorar la ventilación y a la vez difundir está medida de prevención.

Cabe aclarar que la ventilación es uno de los factores determinantes para disminuir el riesgo de contagio de coronavirus por aerosoles acumulados. 

En diálogo con Télam, la bióloga contó que a fines del año pasado recibió a través de una donación del investigador José Luis Jiménez un medidor de CO2 para utilizarlo en Buenos Aires. El profesor Jiménez es un científico español que trabaja en la Universidad de Colorado (EE.UU) y es una de las máximas referencias a nivel mundial en la investigación del contagio del SARS-CoV-2 a través de aerosoles, que son esas pequeñísimas gotas que emitimos al exhalar.

Con el medidor ya en mano, Rubinstein decidió emprender una campaña personal de divulgación "para informar a la comunidad sobre la relevancia de la ventilación cruzada, constante y distribuida en ambientes cerrados y semicerrados para evitar la acumulación del virus SARS-CoV-2 en forma de aerosoles".

En la ciudad de Pehuajó, el primer lugar que midió fue el Centro de Telemedicina Universitaria Covid-19 (Cetec), espacio donde se hace seguimiento telefónico de casos. "Con ellos y ellas pude conversar sobre algunos problemas que había en Pehuajó para poner en práctica las recomendaciones para prevenir el contagio del coronavirus y sumado a esto noté que la recomendación de ventilar no estaba en el mapa de forma evidente", aseguró.

Luego de esta visita, la investigadora subió una publicación en las redes sociales con los hashtag #AbrirFunciona y #VentilarFunciona porque era parte del compromiso de difusión que había asumido con Jiménez: divulgar las mediciones y la recomendación de ventilar.

A raíz de esto, para su sorpresa, el tema comenzó a crecer, la llamaron de los medios de comunicación locales, se contactó y se reunió con el intendente local - quien se comprometió a incluir la ventilación en las recomendaciones- y varios lugares le pidieron que fuera a medir.

"En el Cetec medimos en el salón donde estaban trabajando respetando sus costumbres de aperturas de ventanas y les dió muy bien. Conversando sobre el tema me contaron que de tarde da el sol y tienen calor, entonces cierran las ventanas y prenden el aire acondicionado. Lo que hicimos fue hacer esto y volver a medir. Así pudieron observar cómo el CO2 sube a niveles no recomendados rápidamente", explicó Rubinstein.

Y agregó que "con esta información decidieron que era fundamental mantener al menos 10 centímetros de las ventanas abiertas, colocar mejores cortinas y reducir el número de personas en el espacio".

En ese primer encuentro descubrió que medir era la excusa perfecta para hablar del tema y que las personas entendieran el contenido de la información. Y resaltó: "de ahí en más, en todos los lugares que medí las personas quisieron hacer el experimento de cerrar/abrir para ver qué pasaba anticipándose al resultado".

La bióloga detalló también que "en el hospital el subdirector utilizó el dispositivo y logró determinar que había espacios mal ventilados, y usó esa información para hablar con el arquitecto y planificar una solución".

Cómo consecuencia de esta campaña local, la escuela Técnica Secundaria de Pehuajó armará medidores de CO2 usando como base los tutoriales subidos a las páginas web de @aireamos y de Jorge Aliaga, ex decano de la Facultad de Ciencias Exactas y actual secretario de Planeamiento y Evaluación Institucional de la Universidad Nacional de Hurlingham, cuyo prototipo se encuentra en investigación.

Rubinstein recordó que el SARS-CoV-2 se acumula en aerosoles y que "a mayor cantidad de aerosoles acumulados, mayor probabilidad de respirar los y contagiarnos, aún usando barbijo y manteniendo la distancia social".

En este contexto, "renovar el aire en espacios cerrados o semicerrados, es decir al participar en actividades que no pueden desarrollarse al aire libre es fundamental evitar la acumulación y reducir el riesgo".

Detalló que "la renovación de aire depende del espacio en metros cúbicos y la cantidad de personas respirando y hablando en ese lugar. Cuántas más personas se reúnan en un espacio de trabajo o comercio, más necesario es ventilar porque mayor es la acumulación de aerosoles".

La medición de CO2 puede ser una herramienta clave para medir la ventilación en un ambiente y su acumulación en espacios cerrados o semicerrados es un valor de referencia para indicar si se necesita renovar el aire.

Especialistas recomiendan que superando un nivel de 800 ppm (parte por millón) de CO2 es necesario renovar el aire ventilado. "La ventilación más eficiente es aquella que se produce al abrir una ventana/puerta de forma cruzada, distribuida y constante", finalizó Natalia Rubinstein.