Asombroso cambio del centro de salud de barrio Zumarán

Asombroso cambio del centro de salud de barrio Zumarán

En las últimas horas, la Municipalidad de Córdoba dejó inauguradas las obras en el Centro de Salud Nº 16 de barrio Ana María Zumarán.
Del acto participaron el viceintendente electo Javier Pretto, el equipo médico que se desempeña en el lugar, el cura párroco Padre Mario Presentado y numerosos vecinos que se acercaron con un clima festivo y de gran satisfacción por el trabajo realizado.

Cabe destacar que en este centro de salud y debido al estado de deterioro y abandono en el que se encontraba, durante dos meses la atención tuvo que trasladarse hacia la parroquia Santa Ana y San Joaquín para poder ejecutar las obras de reparación y mantenimiento.
Durante la inauguración de las obras, la secretaría de Prevención y Atención en Salud Comunitaria, Liliana Montero, destacó el compromiso y el trabajo de todos para poder recuperar este espacio de salud tan necesario para la comunidad.

“Este centro de salud se encontraba en un estado lamentable, y eso refleja que cuando un Estado desatiende los espacios comunitarios, es porque hay un marcado desinterés por parte del mismo por su comunidad”, expresó la funcionaria municipal.

“Es por esto que se necesita de un Estado fuerte y presente, que defienda e invierta en la salud pública, entendiendo que es una responsabilidad central, y esto, la gestión del intendente Martín Llaryora ha sabido ver”, aseguró Montero.

El centro, que fue equipado y puesto a nuevo mediante el Programa Repara Salud, forma parte del plan de refacciones impulsado por la Secretaría de Prevención y Atención en Salud Comunitaria y cristaliza el compromiso de la gestión del intendente y gobernador electo Martín Llaryora de fortalecer y potenciar la red primaria de atención de la salud, integrada por 100 centros de salud, la más extensa de América Latina.

El programa se planteó recuperar antes de fin de año 60 centros de salud que necesitaban atención, y el compromiso va camino a cumplirse. Con éste, desde enero, ya son 53 los edificios puestos a nuevo mientras avanzan las obras en otros siete.

En el caso concreto del centro de salud de barrio Ana María Zumarán se trató de una fuerte intervención ya que estaba muy deteriorado y evidenciaba muros agrietados, hundimientos, humedades, baños y techos rotos, producto del uso intensivo y de la falta de mantenimiento durante años. Hoy luce impecable y con nuevos espacios recuperados y puestos a nuevo.

El padre Mario Presentado, párroco de la Parroquia Santa Ana y San Joaquín, lugar al que se trasladó la atención debido a la demanda de obras que debían realizarse en el lugar enfatizó: “Ha sido un gusto compartir el espacio porque en realidad trabajamos en lo mismo en que todos recuperen la paz, la fortaleza, la alegría para seguir el camino. Un centro de salud y la parroquia han podido compartir la tarea de ayudar a sanar a los miembros de la comunidad”.

Repara Salud tiene la particularidad de emplear mano de obra de la economía social para los trabajos de albañilería, instalaciones y pintura general, lo que reporta un doble beneficio, ya que junto con recuperar un espacio de salud se brinda oportunidad de trabajo y capacitación a 300 vecinos y vecinas que, al cabo del programa, recibirán una certificación oficial por su trabajo de parte de la Municipalidad.

Las mejoras edilicias se acompañan con la inversión en equipamiento médico y mobiliario funcional, que va desde el retapizado de camillas hasta la provisión de sillas, escritorios y aires acondicionados para mejorar los espacios de trabajo y brindar un servicio de atención de calidad a los vecinos.

El Antes y el después

Las mejoras en el centro de salud de barrio Ana María Zumarán son evidentes desde la calle y la vereda, si se tiene en cuenta de que antes de que ingresara la cuadrilla de trabajo, había un pozo a cielo abierto en el acceso del edificio por la rotura de un caño, el cual fue reparado.

Ubicado en Sebastián Gaboto 2356, el centro es una referencia para un amplio sector de la ciudad y requirió de una intervención integral que comenzó con el sondeo y reparación total de los sistemas de desagües pluviales y cloacales, que estaban en pésimo estado, lo que provocaron grietas y hundimientos.

La tarea continuó por los techos, que fueron reparados en toda su superficie e impermeabilizados, garantizando de esta manera la seguridad del equipo de salud y de los pacientes que recurren al lugar en busca de atención médica.

Las fotografías tomadas antes del comienzo de los trabajos quedan como testigo y mal recuerdo del lamentable estado del lugar y de las condiciones deplorables que compartían y superaron el equipo de salud y la comunidad.

Patios inutilizados, baños sin revestimientos, humedades, grietas y hundimientos que requirieron de obras eléctricas, sanitarias y de albañilería.

Se cambiaron vidrios, se reemplazaron luminarias, se renovaron las camillas, el mobiliario funcional, las aberturas, y se realizó la pintura completa exterior e interior que adoptó la estética de los demás centros ya recuperados, con señalética amigable en todos los espacios.

Los patios que estaban abandonados e inutilizados, son ahora espacios agradables, fuentes de luz natural y de ventilación, con murales artísticos y plantas.

En lo que constituye otro sello del programa Repara Salud, se habilitó un espacio exclusivo para las infancias, con mesa y sillitas, juegos, colores y libros para amenizar las esperas y recibir como se merecen a los más chicos de la casa.