La mandarina: ¿Que secretos esconden sus gajos?

Ya estamos transitando por el otoño, y con su llegada viene acompañada de una fruta ideal para comer -luego de un buen almuerzo- al patio de la casa, aprovechando de un día de sol. ¡Si, es la mandarina!, la elegida por grandes y chicos. Y como no podía ser de otra manera, en esta oportunidad Código CBA te contará acerca de sus beneficios para la salud que no conocías, algunos tips de belleza y algunas recetas de cocina para que disfrutes de comer esta fruta de otras maneras.

Múltiples beneficios

La mandarina puede ser muy beneficiosa para nuestra piel, ya que al ser rica en antioxidantes y poseer alrededor de un tercio de la dosis diaria recomendada de vitamina C, ayuda al cuerpo a sintetizar el colágeno, mejorando la curación de las heridas de la piel.

Para conseguirlo se puede hacer a través de cremas o aceites esenciales de mandarina, que también se pueden utilizar como antifúngicos y poseen propiedades antisépticas. Su aceite puede ser utilizado para tratar el acné, las cicatrices y la prevención de las estrías.

Además, la mandarina es una gran aliada para combatir las arrugas y en el proceso de envejecimiento de la piel, debido a sus antioxidantes. Y para esto no necesitas consumir mandarinas a diario, es posible también aprovechar sus ventajas a través de mascarillas y cremas; ya que se puede encontrar como componente principal en varios productos de belleza.

El primer tip de belleza es mascarilla casera, la cual refuerza a eliminar la grasa y las bacterias de la piel: sólo hay que mezclar una cucharada de yogurt natural, una cucharada de miel y el zumo de mandarina. Dejamos reposar en la cara durante 10 o 15 minutos y posteriormente te lavas.

Otros de las propiedades de este cítrico, es que tiene vitamina B12, componente que mejora el crecimiento y fortalecimiento del cabello, evitando la caída y reduciendo el proceso de blanqueamiento de los cabellos (canas).

Además, en la mandarina está presente la vitamina A. Se la sabe utilizar en Shampoo y/o acondicionadores, para ayudar a equilibrar la cantidad de sebo del cuero cabelludo y a mantener la hidratación del pelo,  dejándolo con un aspecto más sano. 

El segundo tip de belleza es una solución rápida, sólo hay que unir el jugo de mandarina junto con aceites esenciales y aplicarlos directamente en el cabello y después enjuagarlos completamente.

Por otra parte, esta fruta colabora en el control del peso corporal. En 100g de mandarina se pueden encontrar alrededor de 53 calorías, 0.3g de grasa, casi 2g de fibra, 27mg de vitamina C y 37 mg de calcio. Estas propiedades hacen que esta sea una fruta muy habitual en las dietas para adelgazar, ya que por tener una cáscara dura y aún así ser fácil de pelar, es una buena fruta para ser llevada en el bolso o mochila como tentempié matinal o vespertino.

La fibra presente en ella estimula a la pérdida de peso, mejorando la saciedad de nuestro cuerpo y equilibrando el nivel de azúcar en la sangre. Sus vitaminas reducen la producción de cortisol (la hormona del estrés) que puede influir en el almacenamiento de grasas. De esta manera, al ser un alimento con bajo contenido en grasas, calorías y altos niveles vitamínicos, la mandarina se convierte en una aliada perfecta para dietas balanceadas de pérdida de peso.

Otra de las propiedades que encontramos en ella es la vitamina C, junto con el calcio y fósforo, es uno de los mayores responsables del desarrollo de dientes más saludables. Además, como ya es sabido, la vitamina C favorece a que el sistema inmune se mantenga más fuerte. Por esta razón, es la vitamina más encontrada en remedios para prevenir y combatir las gripes.

En días más fríos, es muy bueno tener en cuenta de hacer té con la cáscara de la mandarina acompañado de otros ingredientes, como la menta o hierbabuena, combinación que nos proporciona una mezcla perfecta con propiedades antivirales. También se puede hacer una infusión con jengibre y lavanda, pues la lavanda ayuda a relajar los músculos doloridos y el jengibre es un anti-inflamatorio natural.

Otra propiedad que encontramos en ella es una bioflavonoide llamada Nobiletin, la cual fue hallada gracias a una investigación académica elaborada por la Universidad de Westen Ontario. Esta investigación, dice que la Nobiletin es una potente sustancia que ayuda a nuestro organismo a combatir la diabetes tipo 2, ya que regula el nivel de insulina en sangre.

Otros de los beneficios de esta sustancia, es que protege de la aterosclerosis, la cual es una gran causa de infartos y ataques del corazón. Es importante destacar también que la mandarina es rica en potasio, sustancia que reduce la presión arterial y promueve un flujo sanguíneo más sano, previniendo la formación de coágulos sanguíneos.

Pero el nobletin todavía va más allá y también ayuda en la prevención del exceso de grasa en nuestro cuerpo, principalmente en el hígado, alentando a nuestro organismo a quemar grasa y no a producirla ni a almacenarla. Así, reduce el colesterol malo  y promueve el buen colesterol. La mandarina se compone también de sinefrina, que frena la producción de colesterol en el organismo.

Hay estudios iniciales que indican que esta fruta también tiene propiedades anticancerígenas de los bioflavonoides encontrados en la mandarina. Se ha demostrado en ratones que ayudarían a prevenir el aumento de las células cancerígenas, reduciendo así la proliferación de tumores.

Otra de los componentes de la mandarina es que es ser rica en fibras, ayudando en el funcionamiento general del sistema digestivo y también de los riñones.

Además, sus aceites esenciales se recomiendan para la prevención de los cólicos y los vómitos incluso para las mujeres embarazadas.

Debido a que se compone en un 90% por agua, la mandarina hidrata el organismo; sus vitaminas y sales mineras colaboran para el tratamiento de las anemias.

Con el consumo de la mandarina natural, la vitamina A y C, presentes en la fruta, pueden ayudar a prevenir la degeneración macular relacionada con la edad, que puede ser la mayor causa de pérdida de visión en edad avanzada.

Además del potasio de la mandarina junto con su vitamina C, que es crucial en la sintetización del colágeno en el cuerpo, ayuda a mantener tendones, ligamentos, huesos y arterias bien unidos.

La mandarina contiene en promedio 20mg de folato, una versión natural del ácido fólico. Aunque nuestro cuerpo necesita una cantidad mayor que esto, siempre es importante conocer las propiedades del ácido fólico, que anima a nuestro cuerpo para ayudar en la reparación y el crecimiento de células y tejidos de ADN.

De esta forma, es un elemento esencial en períodos como el embarazo y la infancia. Si se consume en cantidades adecuadas, el ácido fólico todavía puede ayudar a prevenir cambios de ADN que podrían producir al cáncer.

El deficit de hierro en la sangre puede causar falta de energía y dejar a las personas más pálidas y cansadas. Cuando la vitamina C de la mandarina se consume junto con algún otro alimento rico en hierro, como por ejemplo la espinaca, el cuerpo tendrá una capacidad mayor de absorber este hierro. De esta forma, un jugo de mandarina con espinaca  puede ser una buena forma para empezar el día.

Recetas

Tarta de Mandarinas

Ingredientes:

Para la base de la tarta: 125 g de harina 0000,100 g de azúcar,75 g de almendra molida;100 g de manteca fría y1 huevo para pincelar la masa.

Para la crema de mandarina:100 g de azúcar, ralladura de 2 mandarinas,350 c.c. de agua,150 c.c de jugo de mandarina,3 yemas de huevo y 50 g de fécula de maíz.

Para terminar la tarta:3 mandarinas,1 cucharada de manteca y 2 cucharada de mermelada de naranja

Procedimiento: Para la masa:Cortar la manteca en pequeños dados. Poner en un bowl todos los ingredientes menos el huevo. Mezclar, pero sin trabajar mucho la masa, lo justo para que se unan los ingredientes. Hacer una bola y aplánala un poco. Métela media hora en la heladera envuelta en papel film. Extender la masa sobre un trozo de papel film, cubrirla con otro y aplanarla con el palote. Enmantecar la base de un molde y forrar con la masa. Luego, retirar la masa restante con los dedos. Pincelar la superficie con huevo batido y pinchar toda la masa con un tenedor. Guardar en la heladera por 5 minutos. Precalentar el horno a 200ºC, calor arriba y abajo. Bajar la temperatura a 180ºC para colocar el molde y hornear unos 15 minutos.

Para la crema:Lavar bien las mandarinas, rallar su piel y reservar. Luego hacer jugo con ellas y reservar igualmente. En una olla colocar el agua, el jugo de mandarina, las yemas, la fécula de maíz, el azúcar y la ralladura. Poner sobre el fuego a temperatura media y revolver constantemente hasta espesar, aproximadamente de unos 8 a 10 minutos. Reservar hasta que enfríe colocando un papel film que toque la superficie de la crema para que no haga costra.

Para terminar:Pelar las mandarinas que van a cubrir la tarta, quitando bien toda la parte blanca y córtalas en rodajas. En una sartén antiadherente a fuego medio colocar una cucharada de manteca y pasar las rodajas de mandarina unos segundos por cada lado. De esta manera quedan un poco blanditas y con un sabor delicioso. Verter la crema sobre la base y extenderla con la ayuda de una espátula. Repartir las mandarinas prolijamente de manera circular. Por último, calentar la mermelada unos segundos en el microondas o en la hornalla de la cocina, colar en un colador y pincelar la tarta.

Mermelada de Mandarina

Ingredientes:1 kg de mandarinas,500 g de azúcar, jugo de 1 limón y  piel rallada de 3 mandarinas

Procedimiento: Lo primero que hay que hacer es pelar todas la mandarinas (excepto 2) y retirar todas las semillas de su interior, así como la mayor parte posible de las fibras blancas que tienen adheridas en cada uno de sus gajos. Lo mejor es dejar las mandarinas lo más limpias posibles.Luego, agarrar las 2 mandarinas que no has pelado y rallar su piel o retírarla para después cortarla a modo de tiras. La piel rallada de estas mandarinas servirá para darle un toque decorativo especial a la mermelada, así como un aroma mucho más intenso a mandarina. No olvidar también dejar completamente limpios los gajos de estas mandarinas. Colocar todos los gajos de mandarina en una olla bastante amplia y grande, añadir el azúcar y el jugo de un limón.Situar el fuego a una temperatura media y dejar que todo se vaya cocinando hasta que el azúcar se haya disuelto de forma adecuada; este proceso tardará unos 10 minutos aproximadamente. Ya pasado ese tiempo bajar un poco el fuego para que todos los ingredientes se cuezan durante al menos 30 o 45 minutos y se terminen de integrar entre ellos. Es importante ir removiendo la mezcla de vez en cuando para evitar que se pegue en el fondo de la olla. La mermelada estará lista, si al tomar un poco con una cuchara y darle la vuelta, no se cae. En el caso contrario, necesitará unos minutos más de cocción antes de envasarla. Algo muy importante que no puedes pasar por alto es esterilizar los frascos o botes de cristal en los que vas a conservar la confitura, así te asegurarás de mantenerla alejada de bacterias o residuos que puedan contaminarla.