Capilla croata en Córdoba
Miramar: primera CAPILLA CROATA
R.O.S
Se encuentra en las inmediaciones de Mar Chiquita. Fue hogar de refugiados en la Segunda Guerra Mundial y hoy llama la atención de los visitantes. La Capilla de San Antonio, de origen croata, fue protagonista de hechos,en tiempos donde llegaban a nuestro país una gran cantidad de refugiados procedentes de distintas naciones de Europa. En ese momento, se decide comenzar a organizar “hogares” para niños croatas huérfanos.
Quien se pone al frente de estas obras es el Padre Francisco Leonard Ruscovich, a comienzos de 1930. Pero fue en 1952 que envían un grupo de 33 niños acompañados por los Padres Franciscanos Croatas, a Miramar. Finalmente, los niños se hospedaron en el Hotel Córdoba, algunos de ellos eran eslavos, austríacos y yugoslavos.
Entre esos niños se encontraba Berislav Ostojic, quien con el tiempo se transformó en sacerdote y fue el “último confesor argentino” del Cardenal Bergoglio, hoy Papa Francisco.
A mediados de los ’50 surge la inquietud de realizar un templo de oración al que pudiese asistir la comunidad. Comenzó así a construirse con mano de obra local la primera capilla croata de la Provincia de Córdoba y la segunda de la República Argentina. El estilo de la Capilla es típico de las capillas de las campiña Croata, con mezcla de estilos ya que ellos fueron una Nación invadida y saqueada cientos de veces. Lo más llamativo, además de la construcción, es el dibujo en rojo y blanco sobre la cúpula. Este es el escudo croata, que tiene forma de tablero de ajedrez. Hay varias versiones del porqué de esa forma.
En la vitrina de vidrio de la Capilla se encuentra un material único, como es una biblia del padre Leonard Ruscovich con su firma y cancioneros.
Los muebles son originales y restaurados. La ropa, como manteles y túnicas de monaguillos, es original. La reapertura de la Capilla se realizó el día 11 de diciembre de 2016, con una misa en donde estuvo presente el obispo Buenaventura y padres que estuvieron a cargo de esta comunidad.-Quienes deseen visitar la Capilla con tantos lazos históricos, pueden hacerlo los fines de semana de 15 a 18.