En mi desorden me entiendo
Por Soledad Valenti*. Especial para CodigoCBA.
¿Cuantas veces escuchamos hablar del orden y el desorden? Pues bien, hay una tendencia mundial que abraza el orden de los espacios como sinónimo de orden mental. Dicen, los expertos, que tener acomodado por fuera es el reflejo de tener nuestro interior del mismo modo.
Existen técnicas para mantener todo prolijo, cada cosa en su lugar, por paleta cromática, por texturas, por familia de prendas y objetos, por orden ascendente de izquierda a derecha, por uso frecuente o no.
La verdad no hay nada mejor que vivir en un ambiente armonioso, limpio, ordenado. Esto da ventajas a la hora de encontrar nuestras pertenencias, hace más linda la casa o la oficina, nos llena el alma de satisfacción.
En el vestidor se recomienda hacer una revisión de cada prenda que esta guardada, descifrar que emoción nos genera y cuanto la podemos llegar a usar. Dicen que el 80% de las personas solo usa el 20% de sus prendas. ¿Curioso no?
Con los juguetes, suelen sugerir que no haya demasiados, eso facilita el orden para los más pequeños de la casa e invita a la creatividad.
Por otro lado, con los objetos de decoración y muebles aconsejan tener solo los necesarios para el guardado de nuestras pertenencias y la identidad de nuestro hogar.
Y a los amantes de la cocina y la tecnología, recomiendan no tener cada una de las novedades que trae el mercado.
Este tema es uno de los que puede traer disparidades con nuestros allegados, pero lo cierto es que esta teoría apoya a vivir con conciencia minimalista, haciéndose eco del tan famoso menos es más.
Pero también es cierto que todo lo vivo esta en movimiento, lo estático no tiene vida. Entonces qué bueno que al peinado se le vuelen un poco los cabellos, que los tacones queden cerca de la puerta y caminar descalzas para relajar. Qué lindo es encontrar debajo de tu almohada un juguetito de tu peque, porque le gusta hacer travesuras. Sentirse vivo porque dejamos una taza con la mitad del café sobre la mesa porque el amor nos llamó urgente para vernos. Ver una casa con el calor de hogar y el movimiento que genera algo fuera de su lugar porque hay gente habitándola.
La perfección estática es lo que se puede disfrutar en una revista de decoración, la perfección en movimiento es lo que se puede generar en un espacio con amor.
*Soledad Valenti
Asesora de imagen personal y corporativa
www.soledadvalenti.com