Argentina, a las puertas de un nuevo populismo?

Argentina, a las puertas de un nuevo populismo?


“La Argentina quiere sobrevivir al populismo autoritario. Todos entienden que el actual modelo argentino ha fracasado. Pero nadie quiere abrir una puerta que nuevamente lo lleve al fracaso. Todos los argentinos creen haber probado todas las puertas y piensan que, todas ellas dan al patio del infierno. El futuro es con plan, organización y paciencia, sin motosierras ni dádivas de último momento”

Por ARISTOBULO GONZALEZ

Marcos Aguinis, es tal vez  quien ha brindado la semblanza  más ajustada a la pasión y sentimiento de los argentinos. En “Argentina un país de Novela” y luego con “El atroz encanto de ser argentinos” escanea las raíces profundas de nuestra sociedad. Se pregunta: ¿Cómo puede ser atroz un encanto? ¿Cómo pueden asociarse elementos tan contradictorios? Nos emociona ser argentinos y también sufrimos por ello. ¿Cómo se llegó a esto? Nos duele la Argentina y su pueblo. Por eso, dice Aguinis es atroz nuestro querer. Pero hoy nuestra república parece  extraviada, al borde del desconsuelo, en las puertas del infierno. Cuál es la puerta que debemos abrir para no caer en el abismo? Hay una sociedad exhausta y dañada, con una bronca y una frustración profunda, nacidas de una insidiosa sensación de estafa. Durante la campaña que llevó al peronismo al gobierno, la opinión pública jugó con la idea de un Alberto moderado y la sociedad la terminó comprando.

Doce años de kirchnerismo, marcados por el despojo y el acoso a las instituciones, no fueron suficientes para que el electorado dedujera que el pacto entre Cristina Kirchner, Alberto Fernández y Sergio Massa no tenía otro fin que lograr la impunidad de la expresidenta y aferrarse al poder. Así estamos. Ni gobierno queda. Milei conectado con el sentimiento de buena parte de la sociedad, y dirigida como un misil hacia “la casta”, obtuvo los votos con los que se impuso en las PASO.



Pero hoy Milei  elabora una buena sintonía con la casta y sus representantes. Entre ellos, Luis Barrionuevo, conspicuo dirigente gremial desde hace 44 años al frente de su gremio gastronómico, propuso no robar por dos años para sacar al país adelante. Nadie quiere abrir una puerta que nuevamente lo lleve al fracaso. Casi todos comprenden en la intimidad que el modelo argentino ha fracasado y que avanzamos hacia una dramática definición, hacia un nuevo principio.

El punto es que esos argentinos creen haber probado ya todas las puertas, y haber descubierto que todas ellas dan al patio del infierno. Han fracasado los que sabían y los ineptos, los tecnócratas y los analfabetos económicos, los peronistas y los republicanos, los socialdemócratas y los desarrollistas, los chavistas y los neoliberales. No obstante los argentinos han encontrado otra puerta por el camino: Javier Milei, libre de errores en el pasado pero de quien sospechan también, que esa puerta está llena de interrogantes. Milei puede recoger ira y desencanto, y un futuro incierto. La otra puerta que ofrece el gobierno con más del 100% de inflación y 50% de pobreza, en definitiva populismo extremo, es asumir resignadamente la receta de la larga agonía que nos lleva al fondo del abismo, es decir más inflación, pobreza, la destrucción de la moneda, las reservas negativas y la inseguridad.



Las tensiones sociales y las diferencias generacionales hacen que la opción ante un discurso radicalizado conocido, sea oponer otro igualmente absurdo y radical pero desconocido. La Argentina debe  sobrevivir al populismo autoritario. La gente no desea que tengamos que ver en la pantalla de la política nacional a Frankenstein con una motosierra ni tampoco un nuevo hombre invisible como Alberto Fernandez. La gente quiere y desea un cambio, pero en el fondo está cansada de  las películas inverosímiles de la mala copia del cine nacional. El futuro es con plan, organización y paciencia, sin motosierras ni dádivas de último momento.