Rodrigo De Loredo junto al bloque Evolución Radical rechazarán el Presupuesto 2022
El bloque Evolución Radical, que preside el diputado Rodrigo de Loredo, presentará dictamen por minoría junto a un informe, ante la Comisión de Presupuesto y Hacienda, en el que expresan su postura de rechazo al proyecto de ley de Presupuesto General de la Administración Nacional para el año 2022. Consensuada la estrategia dentro del interbloque de Juntos por el Cambio, se dará quórum para el debate.
Entre los argumentos, afirman que el proyecto “parte de proyecciones macroeconómicas inconsistentes, elaboradas hace meses y que hoy se decantan cada vez como más alejadas de la realidad”.
Además, los diputados firmantes, cuestionan las “numerosas proyecciones de gastos poco creíbles” que figuran en el Presupuesto. “En parte, ello obedece a que el proyecto de presupuesto no refleja los gastos aprobados desde su presentación, muchos de ellos gastos permanentes implementados para aumentar las probabilidades de que el gobierno obtuviera un resultado satisfactorio en las elecciones. En otros casos no se reflejan los cambios en las condiciones de los mercados”, enfatizan.
El bloque tampoco concuerda con el gobierno nacional en que se ponga a consideración un proyecto que no contempla las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional. Al respecto, expresan: “No luce prudente discutir esta Ley cuando esté en ciernes un acuerdo con el FMI que será discutido por el mismo Congreso y del cual no se sabe si este presupuesto tendrá consistencia con dicho acuerdo”.
“Lejos de intentar obstaculizar el funcionamiento del Estado, buscamos que se establezcan las prioridades del gasto en función de recursos de manera previsible. Esto no se puede hacer sobre premisas falsas”, afirman.
Finalmente, sostienen: “Es imposible tener una discusión franca sobre las prioridades del gasto público en un contexto de elevadas necesidades financieras a partir de bases tan falsas como las que plantea el oficialismo. No se puede aseverar nada sobre la evolución futura del nivel real de ninguna línea del gasto si las proyecciones macroeconómicas están total y completamente distorsionadas”.