Moda circular:: Comprar ropa usada, una tendencia que avanza
Por Soledad Valenti.
Asesora de imagen personal y corporativa.
Hace un tiempo atrás era impensado ir a comprar a una tienda de ropa usada, había quienes sentían vergüenza, quienes rechazaban las energías que podían traer las prendas y hasta se ponía en tela de juicio la procedencia.
Hoy es tendencia a nivel provincial, nacional y mundial. ¿Por qué? Porque se ha tomado conciencia de las compras inteligentes, de la necesidad de cuidar a nuestro planeta ya que las nuevas generaciones tienen un compromiso mayor que las viejas. La industria textil es una de las más contaminantes, toneladas de sus residuos terminan en océanos y ríos de todo el mundo.
Un alto porcentaje de personas considera la opción del uso razonable del dinero y la indumentaria a la hora de vestirse.
¿Qué paso? En la década del 90 comenzamos una carrera de consumismo que parecía no tener fin. La realidad a veces supera la misma realidad, 30 años después una pandemia sacudió al mundo y las maneras cambiaron radicalmente.
Si bien, las nuevas generaciones analizan y comprenden de otro modo el consumo, lo que vino a dar vuelta las formas, fue la pandemia.
Entender de raíz que la vida es lo más importante, la familia, los amigos, la salud. Desenterrar el mito de las apariencias y vivir con las realidades, más libres y sin pesos. Descubrir que estar en casa era mejor y que la ropa tenía que ser más cómoda y versátil. Comprender que además se le puede dar más vida que una o dos temporadas, que customizarla o reutilizarla para otra tarea, podía ser posible. Convertirla en dinero vendiéndola o canjearla por prendas que ya han tenido uso pero a la vista eran nuevas; se han convertido en comodines para esta nueva forma de vida, que aplica a quienes deseen ser parte de este tramo de la historia que habla de seres humanos más conscientes y evolucionados.